martes, 5 de junio de 2012


Los italianos

En Tarma



BREVE  INTRODUCCION AL LIBRO DE MI PADRE.



PLAZA CENTRAL DE TARMA







Desde muy temprana edad escuchábamos historias de cómo llegaron los inmigrantes del reino de Italia, y dieron origen a muchas familias en estas tierras de la sierra tarmeña. No faltaron las anécdotas de los italianos llegados al valle de Chanchamayo, todas llenas de aventuras y sacrificios, pues en aquellos tiempos (1870) la supervivencia en Chanchamayo y Perené dependía mucho de Tarma: en seguridad, alimentación, etc. Un viaje a lomo de bestia duraba diez o más horas, dependiendo del jinete y el tipo de cabalgadura.



Así fue pasando un tiempo considerable.



En cierta ocasión, me encontraba viajando de Lima a Tarma, uno más de los cientos de viajes que seguramente hice (hicimos) con el correr de los años. Iba acompañando a mi gran amigo José Da-Fieno Gandolfo, propietario de la hacienda “La Florida, muy conocida hoy por ser también un albergue eco turístico.



Comentábamos acerca de un reciente programa televisivo de un canal estatal, que se refería a la presencia italiana en el Perú. Lo que trajo a la memoria de Pepe el recuerdo que su hermano Domingo, embajador, tenía interés de encargar una investigación sobre italianos llegados a Tarma, asunto que él por sus tantas obligaciones no podía realizar y seguramente le hubiese gustado hacerla, por lo que además de promover la idea se convirtió en gestor económico de la investigación, ya que era persona muy ilustrada y conocedora de la historia de estas tierras. Estábamos completamente de acuerdo en que era justo se supiese algo de ese grupo humano que se aventuró a hacer patria en este rincón peruano.



Yo decidí realizar las investigaciones para el mencionado fin. Lo que me exigía ampliar los conocimientos sobre el esfuerzo y los sacrificios exigidos por el trabajo, y el aporte que hicieran en cuanto al desarrollo de esta zona en el aspecto político, comercial, de salud, agricultura, minería, industria, etc., interrelacionándose con la gente del lugar. Haciendo de esta tierra la suya propia.



Basándome en datos de familias conocidas, retrocedí en el tiempo, para empezar a indagar lo sucedido entre los años 1840-1920, aproximadamente, que es cuando empiezan a emigrar los descendientes de italianos quedando contadas familias de dicho origen en la localidad.



Es interesante mencionar que en el año 1840, después de la independencia, Tarma seguía manteniendo la importancia y prestigio que tuvo en la época de la intendencia, conocida desde Colombia hasta Argentina, como lo demuestra el grupo de comerciantes llegado antes de la independencia desde Argentina, y cuyo mayor representante fue el general Don Francisco de Paula Otero, que a mi entender fue el hombre a quien se debió en gran parte el éxito de la gesta libertadora de Bolívar, lamentablemente no se lo supo reconocer.



Esta ruta comercial de los arrieros que desde Argentina llegaron a vender sus productos y bestias, cruzando buena parte del sur del Perú (Ayacucho, Huancavelica) para llegar a las minas de Cerro de Pasco, pasando por Tarma, era una vía muy rentable.

Es muy probable que los italianos llegados sobre todo al Callao y Lima decidieron aventurarse a comerciar en las sierras de Tarma y Cerro de Pasco. Téngase en cuenta que los primeros en llegar obedecían a una inmigración aventurera y, en muchos casos, con sus propios recursos económicos, lo que luego puso en evidencia la gran visión que tuvieron al proponerse comerciar los productos de la sierra a la costa y viceversa, así como lo que se podía obtener de la selva, conocedores de la cercanía del valle de Chanchamayo.







AUTOR: JULIO CARPENA.